
Vivimos en el mundo de la distracción constante, estamos sometidos a miles de estímulos en cada momento, sonidos, imágenes, un continuo cambio de escenario que nos pone muy difícil estar al 100% con lo que estamos haciendo. El teléfono móvil es el mayor enemigo de la concentración, una y otra vez nos aparta de lo que estamos haciendo en ese momento.
Uno de los aspectos de nuestra vida que más se pueden ver beneficiados de estar presente son las relaciones. Me gustaría que pensaras que tal te hace sentir esa persona (seguro que conoces a alguna) que mientras está contigo está todo el tiempo pendiente de su teléfono, o que mientras le hablas mira para otro lado y te das cuenta de que no te está prestando atención, su cuerpo está ahí pero notas que su mente está en otro lado. Si quieres cultivar relaciones profundas y conscientes no cabe otra opción que practicar la presencia y para eso hay que tener en cuenta algunas cosas:
Para estar presente con alguien tienes que querer estar con esa persona, parece obvio pero piensa cuantas veces estas en un lugar por obligación o vas a visitar a alguien porque no tienes más remedio, o simplemente hay otro lugar donde te gustaría más estar. Vale más la pena la calidad a la cantidad, quizás es mejor visitar menos a esa persona y cuando vayas poder estar al 100%
Estar presente supone un esfuerzo, sobre todo cuando no estás acostumbrado a hacerlo. Cuando estás presente puedes entender a la otra persona, puedes llegar a sentir los sentimiento que está experimentando y de esta manera crear una conexión mucho más allá que la mediocridad de las relaciones más comunes.
Pasamos muchísimo tiempo rodeados de gente, interactuando en relaciones superficiales. Es muy importante pasar tiempo con uno mismo, para poder cargar las pilas y poder estar al 100% cuando estamos con otras personas. Hay gente que va a correr, otros hacen meditación, Yoga, van al gimnasio, o simplemente dan un paseo por el parque o la montaña, cualquier cosa que te ayude a recargar tu energía, a centrarte en ti mismo.
Hay personas que lo ponen muy difícil, son los ladrones de energía, que lo único que quieren es utilizarte par quejarse, para soltar sus malas vibraciones y no están interesados en lo que te ocurre a ti. Piensa si quieres estar presente con alguien así, si aún tienes que pasar tiempo con esa persona, pon límites, dale un tiempo para entrar en la queja y luego no le permitas volver ahí si no te será imposible estar presente.
La única manera que se me ocurre de cultivar relaciones conscientes es estando presente. Este es sin duda el mayor regalo que le puedes hacer a alguien en los tiempos que corren. Apaga el móvil, mírale a los ojos, abre tu corazón y entrégate a esa persona, aunque sea durante 10 minutos la otra persona se dará cuenta.
¿Conoces a alguien que siempre está presente? ¿Tienes algún truco para concentrarte cuando estas con alguien?
“Pon tu corazón, tu mente, tu intelecto y tu alma incluso en tus más pequeños actos. En esto reside el secreto del éxito.” (Swami Sivananda).
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